¿Se puede conseguir un empate y una victoria en un solo partido? Pues en un principio no, pero esto del deporte tiene estas cosas. Uno puede empatar, e incluso perder, y considerarlo una victoria "moral". O lo contrario, ganar e irse a casa con una cara de derrota tremenda.
No es el caso hoy. Los más pequeños de los nuestros, los alevines, jugaban su partido en Maristas. Hasta ahí todo normal. El rival es de los llamados duros. Enfrentarse contra un equipo de balonmano de Maristas es siempre un reto importante. La calidad de sus jugadores y técnicos hacen de ellos grandes equipos, por lo que los nuestros afrontaban el partido con un plus de motivación.
Y el partido ha respondido a las expectativas. Un buen partido de balonmano, bien jugado por ambos equipos, y con un graderío apasionado y disfrutando del mismo. El primer cuarto se lo llevaban los locales por dos goles de diferencia, al igual que el segundo donde ganaban de cuatro goles. Pero a partir de ahí los nuestros han tirado de casta y se imponían en los siguientes cuartos por cuatro y tres goles respectivamente.
Y en estas comienzan las dudas. Si el criterio a seguir es el de inicio de Temporada el partido termino en empate al ganar dos cuartos cada equipo. Si el criterio es el aplicado el pasado fin de semana por el arbitro enviado por la Federación, la victoria es de los del Stadium por un gol.
¿Y que más da? La verdad, sea como sea, hemos disfrutado de lo lindo viendo la mejora en el juego de los nuestros. Cada día son más equipo. Y eso es lo divertido.
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